En este tipo de acciones el inversionista no compra la acción en sí, sino el derecho a cobrar determinada cantidad si, al vencimiento, se cumple la condición de que la acción suba o baje con respecto al precio de la misma al realizarse la compra. Así las cosas el comprador será acreedor a la suma pactada al vencimiento, siempre y cuando se cumpla la condición predeterminada.
Al negociar esta clase de opciones, el inversionista escogerá la opción que desea adquirir, cada opción tiene un valor nominal sobre el cual el inversionista tendrá que decidir si hace “CALL” o “PUT”, es decir, si el valor de la opción al vencimiento estará por encima o por debajo del valor al momento de la compra. Se podría decir que al invertir en opciones binarias lo realmente importante es la tendencia de la acción (alza o baja) y no los índices bursátiles en sí.
El valor de la opción al vencimiento determinará si la opción cerró con utilidad In the Money o con pérdida Out of Money. Si la opción cerró In the Money, el inversionista ganará el cien por ciento del valor de la opción el cual es determinado al momento de la compra. Si la opción cierra Out of Money el valor de la opción será igual a cero. Sin embargo, muchos de los brókers otorgan un valor de reembolso que puede llegar al 15% de la inversión.
Como se puede entender, el riesgo en este tipo de acciones estará siempre limitado y el inversionista sabrá desde el momento de la compra cuáles son sus expectativas de ganancia y cuanto arriesgará en caso de pérdida.
Se pueden negociar opciones binarias en casi todo tipo de activos siendo los más populares:
Acciones (Apple, Microsoft, McDonald, etc.)
Indices bursátiles ( Nasdaq, Dow Jones, IBEX, etc.)
Commodities ( oro, plata, petróleo, etc.)
Mercado de Divisas (USD/GBP, EUR/JPY, etc)